Publicado en Crónica Numismática, 7 de septiembre de 2022
El grabador Pedro González de Sepúlveda, nacido en Badajoz en 1744 y fallecido el 17 de mayo de 1815 en Madrid, fue yerno y discípulo aventajado de Tomás Francisco Prieto. Grabador de Cámara, fue igualmente director de grabado en hueco de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y del Departamento de Grabado y Construcción de Instrumentos y Máquinas de la Real Casa de la Moneda, así como Grabador Principal de la Casa de Moneda de Segovia y Grabador General de las Casas de Moneda de España e Indias a la muerte de Prieto. Destacó asimismo como coleccionista de medallas, grabados y dibujos, y por ser quien propuso al monarca la adquisición a los herederos de Prieto un conjunto de monedas, medallas y una selección de libros de arte que formaban parte de su colección.
En su obra manuscrita Práctica de la Gravadura de moneda, escrita entre los años 1769 y 1770, González de Sepúlveda detalla minuciosamente los pormenores del grabado de los punzones, matrices y troqueles para la acuñación de las monedas. Estos eran forjados por los herreros de las Casas de Moneda, en presencia del grabador. Los instrumentos necesarios para proceder a su grabado eran fabricados por él mismo, debiéndose tener según sus propias palabras el mayor cuidado y delicadeza para ello. Era habitual según su testimonio trabajar con cajas provistas de tornillos para sujetar las piezas, que se apoyaban sobre almohadillas de cuero, para evitar desplazamientos de las mismas.
Una vez terminada la forja, comenzaba el trabajo sobre la matriz. El primer paso consistía en dibujar el motivo principal, y subsiguientemente grabarlo en una lámina de cobre, para posteriormente calcarlo con un dibujador o punta seca sobre la matriz, que estaba cubierta de una capa de cera blanca. Seguidamente se procedía a calentar la matriz, con lo que se derretía la cera y quedaba al descubierto el motivo. Simultáneamente, se modelaba en cera el motivo y se hacía un vaciado en yeso del mismo, cuadriculándose para servir de modelo para el relieve y las dimensiones.
En la matriz se grababa en hueco el motivo, con buriles de media caña en el caso de retratos y con planos o chaples los escudos o motivos, para posteriormente retocarlos con codillos, unas limas curvas muy finas untadas en aceite. También se utilizaban puntas de piedra candía, una piedra abrasiva que se usa típicamente para afilar cuchillos, puntas de pizarra untadas de aceite y piedra pómez molida. Cuando se terminaba el grabado en hueco, la matriz se limpiaba y bruñía desde dentro hacia fuera con gratas, escobillas de metal, y limas, con lo que su superficie quedaba nítida y uniforme y preparada para el temple.
El temple consistía en el endurecimiento del metal, para conseguir que las monedas no se quebraran y quedasen bien grabadas. Era llevado a cabo por el herrero, en presencia del Grabador. Los punzones eran probados golpeándolos con martillos y picadores, o también aplicándoles el ángulo vivo de una lima. Las pruebas de punzones, al hacerse sobre acero, tenían la ventaja si salían bien de servir posteriormente como matrices o contrapunzones de los que se fuesen desgastando o se rompiesen.
Los punzones realizados por el herrero eran retocados por el grabador, que les daba la necesaria forma convexa para reproducir en relieve el huecograbado de la matriz, y eran también templados para resistir el golpe que debían imprimir sobre el troquel. Finalmente, se templaban también los troqueles para realizar las acuñaciones a volante.
Para saber más
CEAN BERMÚDEZ, J.A.,
Nota necrológica del grabador Pedro
González de Sepúlveda, Biblioteca Nacional de España, signatura
MSS/21455/1.
DURAN,
R. y LÓPEZ DE ARRIBA, M., “Carlos III y la Casa de la Moneda”, en Carlos III y la Casa de la Moneda, Catálogo
de la exposición celebrada en el Museo Casa de la Moneda, Madrid, diciembre
1988-febrero 1989.
FERIA Y PEREZ, R., “La industrialización de la
producción monetaria en España, 1700-1868”, VI
Jornadas Científicas sobre documentación borbónica en España y América
(1700-1868), Madrid, 2007, pp. 155-176.
RODRÍGUEZ CASANOVA, I., “La numismática en la España de la Ilustración”, en Almagro Gorbea, M. y Maier Allende, J., De Pompeya al Nuevo Mundo: la Corona española y la Arqueología en el siglo XVIII, Real Academia de la Historia, Madrid, 2012, pp. 157-172.
No hay comentarios:
Publicar un comentario